Aunque parezca increíble, la astronómica deuda de más de 3.7 billones de dólares de la Metro Goldwyn Mayer, MGM, la tienen al borde de la bancarrota, lo que significaría entre muchas otras cosas que perderían la franquicia de la exitosa saga de James Bond la cual tendría que ser vendida a otro Estudio no sin antes tener el permiso de la licencia de Ian Fleming, lo que podría retrasar en años las futuras entregas. Aunque Quantum of Solace duplicó la inversión a nivel mundial, pareciera que no fue suficiente para las millonarias deudas de MGM. Que ocurra lo que tenga que ocurrir...pero la saga no se toca !
Fuente: Deadline Hollywood Daily
