domingo, 8 de noviembre de 2015

James Bond está de regreso en SPECTRE y Daniel Craig se consolida como 007 con su nombre escrito en la muralla...

En el primer fin de semana de su estreno en Chile, SPECTRE la versión N°24 de la saga Bond se mantiene en el top list de las preferencias y no es casualidad. El regreso de Sam Mendes como director, quien ya dejó la vara muy alta en Skyfall, vuelve a dar cuenta de su versatilidad dando cuenta una vez más de su experiencia en un formato que le es cómodo, lleno de acción, con impecable manejo de la luz y del espacio cinematográfico que son sus marcas registradas, la secuencia de precreditos en el Zócalo de Ciudad de México dan cuenta de ello con creces, siempre centrado en la búsqueda aveces oscura de un Bond que sin negar sus orígenes está detrás de una redención que lo acerca al ser humano sensible y comprometido que debe llevar dentro y que se rehúsa a mostrar, sensibilidad y búsqueda que a veces lo atormenta y que el fan de la saga reconocerá inmediatamente.Con una línea argumental sólida en la cual los guionistas Neal Purvis, Robert Wade, John logan y Jez Butterworth tuvieron la virtud de encontrar a través de una línea estructural y conductora que devolvió a la saga a la organización SPECTRE después de 44 años y que lidia con problemáticas actuales a nivel internacional conocidas en su forma pero no en su fondo. De Daniel Craig es poco lo que podemos agregar, se le ve cómodo y totalmente posicionado como 007, el mismo que conquistó a las nuevas generaciones de audiencia y fans con su estilo rudo y aguerrido, en ocasiones rebelde pero fiel a quienes confían en el, Craig nos ha dejado un legado difícil de superar y estará siempre entre los favoritos del público. Las chicas (mujeres) Bond requieren un comentario especial. Mónica Bellucci, a pesar de tener una pequeña parte en el film cumple con creces su cometido, sólido y atormentado, aporta gran belleza y estética al cuadro dando cuenta de la necesidad de incorporar actrices de gran experiencia, creíbles y atractivas de belleza madura. Léa Seydoux lleva gran parte del relato, sorpresa para muchos su gran actuación con primeros planos que la dejarán en la retina de muchos, dando frescura y encarando a Bond una vez más por su pasado "mercenario" pero como en toda la saga finalmente sucumbe a sus encantos protectores. Ben Whishaw en su papel de "Q" tiene un mayor protagonismo en esta entrega y no sería raro verlo posesionado cada vez más en futuras entregas, su juventud, talento y refinado estilo dan cuenta del London Beat que todo Bond film debe tener y que el espectador desea encontrar. Christoph Waltz, el villano de turno gran referente de toda entrega de James Bond aprueba esta vez con lo justo, su organización se ve más grande y poderosa en su cometido por acabar con 007, el recordado Blofelt permanece imbatible a pesar de los años. El tema central interpretado por Sam Smith es sublime, cobrará más y más sentido en tanto nos vamos adentrando en el film. Entre los momentos memorables dignos de mencionar están la car chase en Roma, las cuotas de humor negro y universales entre sus protagonistas y las espectaculares locaciones a los que estamos acostumbrados, con excelentes planos tanto de día como nocturnos muchos de la factura de Alexander Witt el chileno encargado de la Second Unit que una vez más hizo un gran trabajo y se nota. Bond nos vuelve a sorprender, ello a pesar de las criticas que ya enfrenta en algunos países en donde se ha estrenado, con record de asistencia y taquilla debemos decir. No sabemos a donde nos levará la próxima entrega, y si Craig aceptará un ultimo desafío. Por de pronto a disfrutar de una gran película, que a pesar de su extensión de 148 minutos logra cautivar, entretener y sobre todo emocionar, no creemos que los productores hayan tenido otro objetivo que no fuera ese, ni sus fans y seguidores alrededor del mundo. Welcome Back Mr. Bond!!! / Redacción JBC /Foto: SPECTRE Copyright